Disney ha dado un golpe sobre la mesa en su apuesta por convertirse en un gigante del entretenimiento gaming, al incorporar a dos pesos pesados de la industria, Ray Gresko, ex director de desarrollo de World of Warcraft en Blizzard, y Bjorn Tornqvist, ex director técnico en diversos proyectos de Ubisoft.
Gresko se une a las filas de Disney como vicepresidente de producto y desarrollo, con la misión de crear y gestionar un universo de videojuegos que englobe las franquicias más queridas de la compañía, como Disney, Pixar, Marvel, Star Wars y Avatar.
Tornqvist, por su parte, asume el cargo de vicepresidente de tecnología, liderando el desarrollo de la infraestructura tecnológica que dará vida a la nueva era de videojuegos de Disney.
Esta jugada estratégica se enmarca en el acuerdo de $1500 millones de dólares que Disney firmó con Epic Games a principios de este año. La alianza busca crear un universo de videojuegos y entretenimiento interconectado, utilizando como base el popular Fortnite: Battle Royale y las propiedades intelectuales de ambas empresas.
La incursión de Disney en el mundo del gaming
Uno de los objetivos principales que tiene Disney al expandirse en una industria en constante crecimiento es explotar el potencial creativo de las comunidades, tal y cómo lo hemos observado con Fortnite.
El acuerdo con Epic Games pone a disposición de Disney un extenso catálogo de personajes, historias y mundos, lo que le permitirá crear una experiencia de juego única y atractiva para una audiencia global.
Con la incorporación de Gresko y Tornqvist a su equipo, la gran empresa del ratón demuestra su compromiso con la creación de un universo de videojuegos de primer nivel.
Sin duda, este movimiento dará mucho que hablar en la industria del entretenimiento.